octubre 14, 2007

Kill the mosco!

(Relleno de mi cuaderno en medio de receso creativo, o esperansivo)

¿Cómo llevar la buena vida?
¡Y que se yo!...
Bueno, a ver;
Podrías empezar cerrando la ventana
Y mata rápido a ese mosco que se metió a la pieza
La muerte lenta de inodoro es tan sencilla como su versión difícil


Podrías empezar dejando de esperar en la puerta
Podrías derribar la puerta
Y llegar a marcar tarjeta antes de que empiecen a pagarte

Podrías dejar de tomar desayuno con aceite y mostaza,
Y, por favor, no apoyes tu vasito de té en el parachoques de un auto
Podrías aprender a esperar
O esperar pacientemente que se vaya la desesperación
Y dejar el vicio de viajar colgando del pavimento
Dejar el vicio de mirar a los dos lados antes de cruzar
O de mirar para atrás antes de avanzar

Podrías comprarte una agenda
Y dejarla en el baño para leerla cuando tu culo se demore con el maquillaje
O en caso de emergencia, usar esas hojas de tiempo como su pañuelo
En todo caso, se trata de olvidar;
Las largas guías de álgebra en las largas tardes de sol
O los popol vuh que leíste distraído pensando en sexo, televisión, etc.,
Al menos eso creías,
Creemos que podemos contar
Con eso que creemos que es el sexo, la televisión, los etc.,
Pero… Mentira
La buena vida la llevan los que no saben contar
Así que deja de contar los billetes en tu billetera
Deja que los cajeros se queden con tus recibos de cuentas
Deja de contar la cantidad de mujeres que has tenido
O la cantidad que no tendrás

Cuenta con olvidar un poco cada día
Para así llegar, a lo menos, al final
Con menos cosas que contar
Para ser un viejo arrugado,
Que se quede quieto con un poco de vino
Con un poco de comida metiéndosele por al vena
O con unos cuantos viajes por ciudades feas
Paseando por esos lugares que se supone le gusta conocer a los viejos
Con poleras amarillas de algún municipio que quiere extender su imperio
Pero preocúpate de no contar,
De no aburrir a nadie
O por ultimo de no saber que lo haces
O no saber que te cagas en los pantalones
O no saber que cuando meas, sigues goteando orina por otros tres minutos
Cuenta con alguien que te de la buena vida de no saber contar
Y quédate callado de una vez